04 diciembre 2013
Campus Bilbao
El doctor Douglas fue presentado por su buen amigo Goyo Monreal, Doctor en Derecho y quien fuera primer candidato a ocupar la cátedra William Douglas. A través de sus palabras, los amigos del Forum supieron que en los círculos antropológicos y de estudios vascos por el mundo, al profesor Douglas se le conoce como Mister Basque. Para Monreal, una de las mejores obras que resumen el trabajo de Douglas es el libro Amerikanoak, lectura que aconsejó a todos los presentes y a quienes quieran acercarse a la historia de la emigración vasca.
Llegó después el turno de escuchar al principal protagonista de la conferencia, el doctor Douglas, quien ofreció una visión completa e intensiva sobre la historia de la emigración vasca a dos ambientes bien diferenciados. Por un lado, como tema de la conferencia expuso el modelo de emigración a países anglos, centrándose en Estados Unidos y Australia, y en contradicción con la emigración a América Latina. Así, en los dos primeros la emigración fue casi estacional y poco relevante, pues el objetivo de aquellos emigrantes era finalmente volver a sus hogares. Mientras que quienes fueron a Sudamérica, lo hicieron en mayor parte como familias completas con la firme intención de establecerse. Este diferencia de objetivos favoreció la aparición de autenticas redes de contactos en Latinoamérica, que facilitó la mayor llegada de emigrantes vascos. Así surgió una gran diáspora en estos países, mientras que en los anglos la presencia fue más bien marginal y casi anecdótica.
Por estos motivos, hoy en día los principales agentes de cultura vasca fuera de nuestras fronteras se encuentran en los países hispanos hablantes, y en Brasil. Esta cooperación entre agentes externos de estudios vascos e instituciones internas, del propio País Vasco, son la clave, según el Doctor Douglas, para mantener viva la diáspora vasca. El número de Euskal Etxea, clave para el desarrollo de la comunidad vasca en el exterior, crece día a día alrededor del mundo. La reciente inauguración de la Euskal Etxea en Shanghai, abre un nuevo ciclo de emigración vasca al mundo.