21 septiembre 2012
Campus Bilbao
A juicio de Antón Pradera, Euskadi debe imitar el modelo de trabajo de Alemania. Esa obligación de aspirar a la globalidad sintetiza el plan estratégico, presente y futuro, de CIE Automotive, una compañía vasca que en 2011 obtuvo un beneficio neto de 60,6 millones de euros y una facturación récord de 1.839,7 millones. Para su presidente, la fórmula sobre la que se erige latrayectoria de la compañía no es un secreto. Así, citó la flexibilidad, un control financiero excepcional de la actividad y los ajustes hacia cifras lógicas, aunquecree que la tarea del emprendedor no termina aquí.En este sentido, valoró el papel de la diversificación, la necesaria descentralización y los consiguientes departamentos en red, un argumento que otorga un nuevo sentido a la jerarquía de poder y defiende el papel de las plantas que funcionan como pequeñas empresas con su propia cuenta de resultados. Siempre concibiendo cada pedido como un proyecto de inversión.