Este proyecto busca promover las líneas de investigación y proporcionar oportunidades de enseñanza únicas para un joven académico que se encuentra en el comienzo de su carrera académica. La propuesta pretende poner en marcha un programa académico y de investigación sobre un tema emergente en los estudios jurídicos de la UE, la Constitución Económica de la Unión Europea. Como resultado, el solicitante llevará a cabo dos cursos intensivos sobre estudios jurídicos avanzados de la UE, publicará varios artículos científicos y una monografía sobre el tema y participará en seminarios breves, conferencias y conferencias únicas, especialmente en los países candidatos (Turquía y Serbia), fomentando la difusión de los resultados.
La cuestión de la Constitución Económica de la UE es un campo teórico relativamente conocido, pero hasta que la erudición sabe no ha dedicado mucho tiempo a ella. La inestabilidad interordinal que sufre el espacio europeo (coexistencia de Derecho Constitucional Nacional, Derecho de la UE, CEDH, Derecho Internacional con numerosas cuestiones conflictivas, en particular en el ámbito de los derechos humanos) ha sido destruida por lamedidas de crisis y los resultados de la falta o una verdadera gobernanza económica de la UE. De hecho, además de la complejidad de la cohabitación de los diferentes ordenamientos jurídicos que coexisten en el espacio europeo, diferentes actores (empresas, organizaciones internacionales, instituciones privadas...) están emergiendo como legisladores en el contexto transnacional.
La crisis económica actual ha afectado, al menos, a algunos principios fundacionales de la Unión Europea. Los principios ordoliberales de la Constitución Económica Europea parecen estar luchando con los crecientes mecanismos de intervención que la UE está estableciendo para controlar la crisis económica. Esos mecanismos, que son realmente complejos, a veces se aplican eludiendo el proceso ordinario de toma de decisiones institucional, con la consiguiente falta de transparencia de esos procedimientos, también afecta a la legitimidad de la propia UE.
